CONGRESO

llamado a nombrar registrador ad hoc

BOGOTÁ, ABRIL 12 (PRENSA SENADO). Por lo complejo de las presuntas irregularidades presentadas en las elecciones del pasado 13 de marzo en asuntos como la inscripción de cédulas, el software de los jurados y las razones del por qué el Pacto Histórico conoció previamente las irregularidades en 23 mil mesas, el presidente del Senado, Juan Diego Gómez, reiteró las críticas a la función cumplida por el registrador nacional, Alexander Vega.

El dignatario del Senado se refirió a las recientes declaraciones del registrador Vega, en el sentido que no fueron 500 mil sino más de un millón de votos los que aparecieron en el escrutinio. “La última entrevista del registrador es completamente desorientada, parece que no estuviera al frente de semejante responsabilidad para el país. Por eso eso es que le pedimos hoy a las autoridades competentes, a la Procuraduría y a la Fiscalía actuar en este caso”.

Gómez recordó que “hay denuncias puntuales como la de Transparencia por Colombia sobre la dotación de más de 300 mil testigos electorales en dos oportunidades; más de 800 mil cédulas que se inscribieron de manera electrónica existiendo la prohibición legal de hacerlo y teniendo también la sanción de perdida del empleo al funcionario que lo haga sin el lleno de los requisitos”.

Planteó igualmente que “en tercer lugar todo lo hemos concentrado en la auditoría del software, lo importante es que el fraude, tal y como lo tenemos establecido y hemos revisado, es que el software de jurados electorales perfila y selecciona los jurados y los envía a las mesas en donde pueden aparecer estas cifras, coincidencialmente la cifra de 23 mil mesas es la misma que el Pacto Histórico había anunciado con anticipación y allí aparecen por arte de magia los votos. Esto amerita para que las autoridades competentes tomen cartas en el asunto y nombren cuanto antes un registrador ad hoc para que se roben las elecciones presidenciales en Colombia”.

Esta solicitud la hizo el presidente Gómez la había hecho desde la semana anterior en la plenaria del Senado, en donde hubo un debate de control político en el que se expusieron, por parte de las diferentes bancadas, las posibles irregularidades en el proceso electoral de marzo pasado.